
La Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires volvió a poner en debate un proyecto de gran peso institucional: la creación de un servicio penitenciario propio, con un régimen jurídico que acompañe tanto la ejecución de la pena como la reinserción social de quienes atraviesan una condena.
En una reunión conjunta de las comisiones de Justicia, Seguridad, Legislación del Trabajo y Asuntos Constitucionales, legisladores porteños recibieron a funcionarios y especialistas para seguir analizando la propuesta. Entre ellos, estuvo presente el subsecretario de Política Criminal y Asuntos Penitenciarios, Leandro Halperín, quien expuso los lineamientos centrales del proyecto.
Ejes del debate
Uno de los puntos que más resonó en el encuentro fue el rol de la víctima. En línea con lo que establece la Ley 6115, se destacó la necesidad de que sea informada y escuchada durante todo el proceso. Además, se discutieron alternativas de reparación que no impliquen prisión y la incorporación de herramientas de justicia restaurativa, un tema que genera diferencias entre los distintos borradores de ley.
Otro aspecto innovador fue la propuesta del llamado “plan de vida”. A diferencia del clásico esquema de actividades dentro de una cárcel, este enfoque busca acompañar a la persona condenada en función de sus necesidades particulares, promoviendo derechos, educación y trabajo. La idea es que pueda implementarse con el apoyo de organizaciones sociales, universidades, cooperativas y hasta empresas privadas, para garantizar que la reinserción continúe una vez que la persona recupere la libertad.
También se puso sobre la mesa la importancia de incluir en programas educativos, culturales y laborales a quienes están detenidos sin condena, con el fin de evitar largos períodos de inactividad. Sin embargo, se remarcó la necesidad de garantizar la separación física entre procesados y condenados para evitar conflictos.
Desafíos de infraestructura
Un tema clave es la infraestructura. La Ciudad no cuenta hoy con cárceles propias y, por eso, se está trabajando en un convenio con el Estado nacional para utilizar establecimientos disponibles fuera del territorio porteño, aunque bajo normativa de la Ciudad.
Lo que viene
La discusión parlamentaria continuará en las próximas semanas. El objetivo de los legisladores es alcanzar un texto consensuado que pueda ser llevado al recinto y convertido en ley, dando a la Ciudad la posibilidad de contar por primera vez con un sistema penitenciario propio.